El retrato
Iris Romero, saltando barreras con la Beca de Grado Jesús Serra
Newsletter #5 | Diciembre 2025
Hace algo más de un año, Iris Romero —una joven vallisoletana fascinada por la informática desde niña— cruzaba por primera vez las puertas de la Universidad de Valladolid para comenzar Ingeniería Informática y Estadística. Llegaba con ilusión, dudas y como una de las primeras becadas de nuestro programa Becas de Grado Jesús Serra. Este primer curso en la universidad se convirtió en un viaje lleno de descubrimientos personales y académicos, y también en un año de sentirse acompañada por nuevos amigos, por su familia, y por Francesc Salvador, su mentor de la Beca Jesús Serra. Un primer año en el que empezó a saltar todas las barreras hacia su futuro.
Durante los primeros meses, según describe Iris, la entrada al mundo universitario cogió un ritmo vertiginoso: las primeras líneas de código, los trabajos en equipo, los exámenes… y también los pasillos con nuevas caras que luego se convirtieron en amistades.
A Iris siempre le ha gustado formar parte de la comunidad. Ahora, como universitaria, se enroló como docente en el Club de Jóvenes Programadores de la UVa, enseñando a niños y adolescentes a dar sus primeros pasos en programación. Una experiencia que comenzó como un reto, y que la ayudó a coger soltura para hablar en público y liderar equipos, y también a comprender que enseñar es también una forma de aprender. Pero aquí no acabaron sus periplos universitarios. Participó también en la organización de las Olimpiada Informática de Castilla y León y la jornada de puertas abiertas de la Universidad de Valladolid, donde compartió su propia experiencia con futuros estudiantes.
Una de las personas que la ha visto crecer durante estos meses ha sido su mentor, Francesc Salvador, project Manager Office del equipo de Analítica de Negocio en GCO. Desde su concepción, las Becas de Grado Jesús Serra incluyen un programa de mentoría que es uno de los pilares del paquete de beneficios de estas becas. En el caso de Iris, de la mano de Francesc, trabajaron en habilidades que van más allá de lo académico: comunicación, técnicas de presentación, liderazgo, productividad e incluso el uso responsable y eficiente de herramientas digitales e inteligencia artificial. “Saber que hay alguien pendiente de mi evolución me ha dado seguridad, confianza y ánimo para ir progresando en mis estudios”, explica Iris. Francesc, por su parte, destaca cómo Iris se ha integrado en la vida universitaria y la madurez con la que está afrontando los desafíos del grado.
Además de este acompañamiento personalizado, los becados Jesús Serra participan en un programa de formación con sesiones online para conocer a personas con trayectorias profesionales inspiradoras, y una jornada de formación presencial. Este año, conversaron con referentes de 1ª generación familiar con estudios de grado, como Jaume Ripoll, cofundador de la plataforma Filmin; Pablo Santaeufemia, cofundador de la empresa Bridge for Billions o Nerea Roldán, presidenta, directora general y co-fundadora de la ONG Ser Madre, Ser Mujer, quienes compartieron aprendizajes, errores y decisiones clave que marcaron sus carreras. Para Iris, esas sesiones fueron “ventanas que te enseñan que el camino profesional no es una línea recta, sino algo que se construye paso a paso”.
En octubre, la segunda cohorte de Becados Jesús Serra se reunieron por primera vez con los becados que, como Iris, ya estaban en segundo de grado. Fueron dos días para empezar a conocerse, construir comunidad y compartir inquietudes. En la jornada de formación, a través de talleres sobre desinformación y fake news, sobre el método DISC —que les permitió conocerse mejor, y entender cómo responden a desafíos e interactúan con otras personas— fueron tejiendo nuevos hilos en esa red de Becados Jesús Serra, que queremos que les acompañe durante sus estudios y lo largo de la vida.
Nos dice Iris que en la universidad y gracias a la beca no solo ha ganado conocimientos, sino también perspectiva, apoyo y oportunidades que no imaginaba. Desde Fundación Occident nos sentimos orgullosos de ella, y seguimos caminando a su lado hasta donde ella quiera llegar.